Naoko solo se sonroja y sale corriendo muy avergonzada, Kintaro sin dudarlo se enlistaría en la campaña electoral del señor Katsuda, bueno tiene que conformarse con poco ya que de nuevo le toca lavar baños ya la persona que lo hace no podrá asistir ese día ya que su hijo se encuentra muy enfermo y Kintaro acepta el puesto vacante.
 El trabajo es bastante pesado, pero la simple presencia de Naoko anima a Kintaro y sin tardar un
segundo más se lanza a la conquista de la chica, pero uno de los compañeros de Kintaro le advierte que es muy peligroso acercarse a la joven, pues su padre es muy celoso y la protege demasiado, si no tiene
cuidado podría resultar muerto, pues ya ha pasado antes que todo aquel que quiera pasarse de listo con
su hija termina en un lago metido hasta la cintura en un barril con concreto para que no pueda flotar y
muera ahogado y además nunca puedan encontrarlo, pues no saldrá el cuerpo a la superficie, el jefe es
demasiado influyente como para que le haga algo la justicia, no habría forma de culparlo.
 Así que Kintaro no tiene más remedio que seguir haciendo la limpieza, sin embargo no se da por vencido,
y poco a poco logra hacer otros trabajos distintos pegar letreros y carteles, claro sin dejar de soñar
despierto por Naoko, pero aún así no deja de lavar baños, precisamente en uno de esos sueños despierto
se imagina abrazando a Naoko, precisamente lo sorprende Naoko abrazando el excusado, por lo que sin
saber que hacer Kintaro rápidamente mete la cabeza en el agua del retrete diciendo que se estaba
lavando la cara, Naoko lo toma de una mano y lo lleva hacia su cuarto para darle una toalla por lo que
Kintaro se siente el hombre más afortunado del mundo.
 Para sorpresa de Kintaro de pronto Naoko comienza a desnudarse frente a sus ojos sin mostrar ninguna
pena, Kintaro está que se vuelve loco de tener a una mujer así enfrente, pero no puede ni siquiera tocarla pues si intenta pasarse de listo se muere, en realidad Naoko gusta de jugar con los hombres de ésta manera, pues ella solo será una tentación, haciendolos sus esclavos y juguetes, finalmente Kintaro decide salir de la habitación, Naoko solo dice “de ahora en adelante, serás mi juguete personal, Sr. Pervertido”.
 Kintaro continúa con su trabajo, por lo que se encuentra a Naoko mientras pega letreros mientras ella
viene de la escuela, en cuanto se encuentran Naoko se disculpa por lo ocurrido en la ocasión anterior,
pero Kintaro está muy molesto por como ella lo trata. De pronto Naoko cae al suelo, el la toma en sus
brazos antes que caiga al suelo y alcanzando a abrazarla y tocando varias partes no permitidas, Kintaro
se queda en Shock, sin saber que hacer, pues que más va hacer, comienza a acariciarla, rápidamente ella
le da un fuerte empujón, sale corriendo  y dándole una nota en la que le dice que lo ve en la noche..
 Poco después Kintaro busca a Noako para ver porque lo quiere ver, ¿cuál es el motivo?, Bueno ella no es
buena para las matemáticas, así que quiere que Kintaro la ayude con sus tareas, Kintaro acepta, además
de ofrecerse como tutor de Naoko en matemáticas, ella también acepta, sin embargo la situación no
sería de lo más fácil ya que a cada rato ella lo está provocando y obviamente cuando el cede ella se pone
a pone a gritar que Kintaro se está pasando de listo con ella y hay que recordar la amenaza que pende
sobre el cuello de Kintaro, así que ya se imaginarán la situación de Kintaro que solo tiene que aguantar
sin protestar todo lo que le ocurre.
 En todo momento Kintaro no deja de tomar nota en su cuaderno de lo que ocurre día a día, cosa que
nota Naoko y decide un día echar un vistazo para ver que tanto escribe Kintaro, lo que lee en el cuaderno no le agrada en lo más mínimo ya que muestra claramente que Kintaro ya está cansado de la misma situación una y otra vez, del hecho de que Naoko se burle de el así como así, todo sería muy diferente si ella comprendiera como se siente el, pero parece que ella no quiere entenderlo.
 Finalmente el padre de Naoko queda elegido como alcalde, al mismo tiempo Kintaro busca por todos
lados su cuaderno pero no lo encuentra, así que le pregunta a Naoko si no lo ha visto, pero contesta
en forma negativa, para sorpresa de Kintaro Naoko de pronto toma unas tijeras y empieza a despedazar
su ropa dándole las tijeras rápidamente a Kintaro que no sabe ni que está pasando al tiempo que
comienza a gritar Naoko que Kintaro se metió a su habitación y que la atacó.
 En cuestión de segundos llega el padre de Naoko con varios hombres de seguridad y al ver lo que ha
ocurrido ordena a us hombres que le den una paliza a Kintaro, Naoko está segura que pedirá perdón
y suplicará por su vida, lo que ella quiere es ver la cara que pondrá Kintaro, pero no es así, Kintaro no 
opone resistencia alguna y grita que ama a Naoko pero que ella siempre lo trata como un juguete.
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